Catalina Droppelmann sobre voto de personas privadas de libertadEmolTV/ 27 de julio 2022 / Entrevista de Bárbara Briceño a Catalina Droppelmann, investigadora VioDemos y del Centro de Estudios Justicia y Sociedad UC.

Catalina Droppelmann, investigadora VioDemos y Directora ejecutiva y de investigación del Centro de Estudios Justicia y Sociedad de la Pontificia Universidad Católica de Chile, conversó en EmolTv sobre la situación que viven hoy las personas privadas de libertad en Chile y cómo evalúa la posibilidad de voto de personas privadas de libertad para el Plebiscito Constitucional del próximo 4 de septiembre.

Desde una mirada general respecto a lo que se vive hoy dentro de las cárceles, Droppelmann señala que en general la población penitenciaria queda bastante invisibilizada frente a otros temas que preocupan a la población, como el aumento de los delitos y la victimización. «Hay muy poca información de la población que está recluida en las cárceles. Y lo que se sabe es que las condiciones en las que están son bastante deplorables: no cuentan con acceso a servicios básicos, en varias cárceles el hacinamiento supera el 100%, y tampoco tienen acceso a programas de rehabilitación y reinserción«.

Respecto a esto último, la investigadora indica que se suele pensar que la solución es construir más cárceles, pero en verdad el enfoque debiese promover las medidas alternativas a la cárcel. Droppelmann explica que cuando una persona es condenada por un delito, esta condena se puede cumplir en un medio cerrado (cárcel), pero también en libertad bajo un acompañamiento y con la participación de programas de reinserción e intervención sociocupacional. En Chile esto representa un 60% y 40% respectivamente, y en los países más desarrollados estas cifras son alrevés. En este sentido, para la académica esta medida es una de las más importantes «porque con eso evitamos la prisionización que tiene consecuencias negativas para las personas ya que aumenta el contagio criminógeno».

Y sobre derechos sociales, hay un punto que también contribuye a este proceso de reinserción social: el voto desde los centros penales. «La posibilidad concreta de que el Estado organice y brinde las condiciones para que las personas privadas de libertad puedan votar es tremendamente importante, porque ellos/as no pierden su condición de ciudadanos/as y el reconocimiento de esta condición facilita la reinserción social», comenta Droppelmann.

Y continúa: «Cuando las personas salen en libertad, para poder reinsertarse junto con dejar de cometer delitos, también tienen que generar un proceso de inserción que se basa y se sustenta en el reconocimiento de ellos como ciudadanos, como personas que no delinquen. Cuando sales en libertad ya cargas con un estigma importante, y si ese estigma se prolonga se vuelve más difícil el proceso de rehabilitación y reinserción. Desde este punto de vista, no tener la posibilidad de votar le comunica a estas personas que no son ciudadanos importantes, cuya opinión no es considerada en los temas país. El voto  tiene que ver con la democratización de las cárceles en materias de participación ciudadana. En esta materia, hay varios avances en el reconocimiento de ciudadanía en la propuesta de la nueva Constitución».

Revive la entrevista en EmolTv.