La instancia, protagonizada por el destacado escritor chileno y la psicóloga e investigadora en derechos humanos y Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 2017, tuvo lugar en el Museo de Artes Visuales, MAVI.
Moderada por Marcela Cornejo, investigadora del centro y académica de la Escuela de Psicología UC, la actividad buscó abrir un diálogo acerca de las violencias, las memorias y desmemorias.
“La clave generacional ha estado puesta en las discusiones de país, de democracia, de política, de las formas de recordar y de reencontrarnos. En estos tiempos que corren, y frente a los desafíos que se nos vienen por delante, poder contar con las reflexiones de Elizabeth Lira y Ariel Dorfman sin duda contribuirá a nutrir nuestros pasos futuros”, fueron las palabras de la académica para comenzar la jornada.
La memoria de las piedras
En más de una hora, el escritor y la investigadora conversaron en torno a cómo pensar las violencias y hacer memoria en Chile. A partir de un incidente en su llegada al país, Ariel Dorfman abrió la conversación haciendo una analogía entre la memoria y los stolpersteine.
El artista alemán Gunter Demnig elaboró a serie cubos de cemento cubiertos por una placa con la información de aquellas personas deportadas y/o asesinadas durante el periodo de la Alemania nazi. Estas “piedras” conmemorativas- como las llama Dorfman- nos traen al presente las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas en esos lugares.
“Cuando te pegas contra eso, caminando, te das cuenta que estabas frente a un momento histórico de pérdida y desaparición terrible. Entonces, yo me dije: lo que le hace falta a Chile es que estas piedras estén en todas partes, que nos hablen, para que la gente tome conciencia de lo que ha pasado”, señaló el escritor.
Y añadió: “Si nosotros tuviéramos una política -y este es el momento para hacerla- en que en cada valle, en cada villa, en cada ciudad haya estos stolpersteine, y si nosotros hacemos que la gente desmemoriada y cotidiana de Chile se esté pegando en los pies contra esto, creo que este sería otro país”.
Levantarse contra la deshumanización
“Me vienen muchas cosas a la mente con esto que tú propones”, comentó Elizabeth Lira, “sobre todo cuando se dice en los monumentos o placas que tal persona ‘murió por un país’”. “En este país no tenemos condiciones todavía para decir que alguien murió por Chile, que alguien fue ejecutado o desapareció por Chile”, señaló la académica, “porque lo que hoy no tenemos es esta noción de corresponsabilidad y de reciprocidad”.
“Algo nos ha pasado que los Derechos Humanos quedaron asociados a las violaciones, a la denuncia y a una oposición política. Mucha gente hoy escucha el término e inmediatamente piensa que se trata de una postura izquierdista o que es una acción negativa. No hemos logrado colocar los DDHH como un tema afirmativo”.
Para la investigadora, hay algo entre nosotros que nos cuesta reconocer, y es que las violaciones a los DDHH nos dividen porque tenemos juicios éticos distintos. Durante todas estas décadas, según Lira, hemos perdido de vista el sentido más literal y básico de la declaración universal de los derechos humanos: levantarse frente a la deshumanización, cuestión que -desde su visión- estamos muy lejos. “A mi me preocupa, porque siento que las ‘piedras’ no nos hablan todavía, falta para que nos puedan hablar”, sentenció la investigadora.
En este sentido, para avanzar en materia de Derechos Humanos, Ariel Dorfman indicó que hay un enemigo al cual debemos enfrentarnos: el miedo. “Yo creo que la gente tiene miedo, de lado y lado, y uno de los errores que se cometieron durante la Dictadura fue instalarlo en la población”.
Por lo mismo, para el escritor, terminar con este miedo es fundamental. “Necesitamos menos miedo, menos rabia, y más arte, más cultura que unifique, más cuestionamiento de uno mismo, más firmeza y amabilidad en lo que uno piensa también”.
Para Elizabeth Lira, “formarnos como corresponsables del destino del país es una tarea que debe tomar cada generación para enfrentar este miedo y crear memoria”. Y puntualiza: “De repente se nos olvida que la única forma de hacer una continuidad es poder compartir estas experiencias y estas ideas, y poder ser parte de los grupos de investigación, tomando distintas generaciones de alguna manera permite hacer esa integración”.
Infancia en Chile: discursos adecuados, prácticas oscuras
Haciendo referencia a la calidad de la relación entre padres-hijos, marcada en muchos casos por abusos y violencia intrafamiliar, Lira llega a una conclusión: “si tú puedes maltratar a los que son tu sangre, ¿qué cuesta maltratar a un extraño, a un enemigo o alguien a quien puedes deshumanizar?”.
“Mi preocupación va porque tenemos una gran disociación: tenemos discursos muy adecuados, pero tenemos prácticas muy oscuras” explicó la académica, y continuó: “Hay muchas cosas en las que nos falta unir la relación entre los grandes problemas que tenemos como sociedad y lo que pasa a las personas”
Y explica: “Creo que de esas cosas tenemos que hablar también, porque si a ti te parece posible maltratar a tus cercanos, claramente no puedes pedir que la autoridad y las fuerzas policiales no maltraten a las personas. Tienes que educar desde un comienzo que hay un límite y que el límite no es el delito, el límite es un límite ético”.
En esta línea, para los expositores, el gran aporte que han hecho los Derechos Humanos es invitarnos a un nuevo tipo de relación social. Este nuevo tipo tiene que estar en la base, en el reconocimiento de la dignidad de la otra persona, que impide maltratarlo bajo ninguna circunstancia.
Les invitamos a revivir el diálogo por nuestro canal de YouTube VioDemos.